Hablemos de cosas incómodas.
Hablemos de por qué en el segundo mes de 2022 seguimos usando mascarillas en lugares abiertos y bien ventilados como parques o playas, cuando ya tenemos vacunas altamente eficaces e inmunidad híbrida, que conceden un casi súper poder inmunitario a mucha población. O de por qué estamos obligando a nuestros hijos a ir al colegio con mascarillas, haciéndoles perder lo más importante de su niñez: el contacto con otros seres humanos, las risas, los abrazos, la cercanía sin tapujos, cosas que no volverán con los años.
No nos estamos dando cuenta de que nuestro miedo como adultos está condicionado a situaciones distintas y a nuestra conveniencia; no estamos pensando en nuestros hijos, estamos pensando en nosotros.
Si bien al principio de la pandemia no sabíamos qué esperar o hacia dónde ir, y el miedo era razonable por precaución y por prudencia, dos años después debemos empezar a cambiar nuestras percepciones y no obligar a otros y estigmatizarlos por no tener el mismo miedo que nosotros. Tenemos vacunas -el principal game changer- que no solo protegen de la infección o la muerte, sino que, en cierta medida, protegen a los que están a nuestro alrededor, algo que sinceramente sabemos hace mucho. Yo no comprendo por qué es tan difícil entenderlo, porque no es un descubrimiento, es una afirmación antigua.
Quiero aportar una razón válida para que muchos padres que aún temen que sus hijos se contagien en el colegio ya no lo hagan: datos de varios estudios indican que los nenes no sufren el COVID19 como lo hacemos los adultos, sobre todo los que sobrepasan los 50 años.
Algunos datos al inicio de la pandemia indicaban que los peques podían ser afectados por lo que llamamos “ long covid”, pero estos se han ido clarificando con el tiempo, y cuando los estudios fueron más rigurosos -usando grupos control- se pudo determinar que los síntomas como la fatiga constante o la falta de sueño, no estaban presentes solo en los niños que habían contraído el virus, sino también en los que no, pero que pasaban por las mismas condiciones de estrés: ansiedad, pérdida de seres queridos, la interrupción de la escuela y, sobre todo, la soledad. Cuan triste es la soledad de un niño que no puede ver a sus amigos (1–3).
Así mismo, pedir a los niños usar la mascarilla durante todo el tiempo de clases me parece un sinsentido mayúsculo; y que, además, esto pueda asociarse con ciertas conductas discriminatorias hacia quienes no quieren o no pueden portar una mascarilla, algo indignante y peligroso. El estudio más grande que se ha hecho para determinar si hubo disminución de infecciones cuando los estudiantes usaban mascarillas, mostró que no había diferencias significativas con el uso de esta medida, al contrario de cuando se usaron métodos de ventilación como filtros HEPA o abrir ventanas y usar ventiladores comunes, así como el uso de mascarillas para el personal no vacunado (4). Este estudio tuvo como muestra 90 mil estudiantes, y creo que es suficiente evidencia para poder tomar algunas decisiones importantes cuando vayamos a enviar a nuestros hijos al colegio.
Tengo que hablar de esto porque los adultos estamos obligando a nuestros hijos a actuar según nuestros miedos, y eso no es justo; se sabe que el daño del uso de mascarillas en niños y en personas con discapacidades auditivas y de habla, y aun en nosotros mismos es grande (5–7), y que no nos daremos cuenta probablemente hasta que los daños sean irreversibles.
Pienso que este momento, en el 2022, la pandemia que se nos avecina es la de la salud mental. La soledad, el no poder comunicarnos completamente, la falta de cercanía física, el miedo latente, todo esto hará que un porcentaje de la población sufra -si no lo está sufriendo ya- síntomas de estrés postraumático que no podremos revertir. Eso me preocupa más en este momento que salir sin mascarilla a correr o a dar una vuelta.
Y si tengo que ser coherente, lo soy. Yo no uso mascarilla al aire libre hace seis u ocho meses, desde que fui vacunada, corro y camino por la calle sin mascarilla; en ambientes cerrados la uso cuando no sé el estatus de vacunación de los que me rodean, pero si todos están vacunados no la uso. Si, sé que no todos calculan sus riesgos como yo, tal vez soy representativa de una parte pequeña de la población -o tal vez no-, pero sé que la vida es un riesgo, eso lo hemos sabido siempre. Más niños mueren de otras enfermedades que de COVID19(8), y esto es un hecho, no una opinión; me parece y me seguirá pareciendo un sinsentido mayúsculo abrir restaurantes y no usar mascarillas dentro y a la vez obligar a nuestros hijos a ponérselas en un salón de clases. Un sinsentido cruel e injusto.
Nuestras verdaderas medidas y exigencias deberían ser que comencemos a cambiar la infraestructura de los salones de clases de todos los colegios, universidades e institutos del Perú, así como de los centros laborales, por estructuras ventiladas y menos tugurizadas, con uso de filtros HEPA en la medida de lo posible o con medidas de ventilación paliativas como usos de ventiladores o apertura de ventanas. Ese debería ser el verdadero punto de exigencias, no la de usar mascarillas, que a veces ni siquiera estarán al alcance de una parte importante de la población.
- Borch L, Holm M, Knudsen M, Ellermann-Eriksen S, Hagstroem S. Long COVID symptoms and duration in SARS-CoV-2 positive children – a nationwide cohort study. Eur J Pediatr. 2022 Jan 9;
- Controlled studies ease worries of widespread long Covid in kids [Internet]. STAT. 2022 [cited 2022 Feb 19]. Available from: https://www.statnews.com/2022/02/14/controlled-studies-ease-worries-widespread-long-covid-kids/
- CDC COVID-19 Response Team, CDC COVID-19 Response Team, Bialek S, Gierke R, Hughes M, McNamara LA, et al. Coronavirus Disease 2019 in Children — United States, February 12–April 2, 2020. MMWR Morb Mortal Wkly Rep. 2020 Apr 10;69(14):422–6.
- Gettings J. Mask Use and Ventilation Improvements to Reduce COVID-19 Incidence in Elementary Schools — Georgia, November 16–December 11, 2020. MMWR Morb Mortal Wkly Rep [Internet]. 2021 [cited 2022 Feb 19];70. Available from: https://www.cdc.gov/mmwr/volumes/70/wr/mm7021e1.htm
- Research brief: COVID-19 means more students not learning to read. :7.
- Who is that? Kids find it more difficult than adults to recognize faces behind masks [Internet]. EurekAlert! [cited 2022 Feb 19]. Available from: https://www.eurekalert.org/news-releases/942373
- Grundmann F, Epstude K, Scheibe S. Face masks reduce emotion-recognition accuracy and perceived closeness. PloS One. 2021;16(4):e0249792.
- Child mortality and COVID-19 [Internet]. UNICEF DATA. [cited 2022 Feb 19]. Available from: https://data.unicef.org/topic/child-survival/covid-19/