Por Eloy Espinosa
En un mundo cada vez más comunicado entre sí, el manejo de las relaciones internacionales debe serlo más cuidadoso posible, para así, entre otras cosas, no generar innecesarias polémicas que a nada nuevo llevan.
Y uno de ellos se encuentra vinculado con el Sáhara Occidental.
Sáhara Occidental fue una colonia española ubicada entre el Océano Atlántico y el desierto del Sahara hasta 1976, cuando España abandonó el Sáhara Occidental, luego de la llamada Marcha Verde, y conforme con lo previsto en los Acuerdos de Madrid de 1975, no considerados válidos según el Derecho Internacional
La mayor parte de su territorio ha sido ocupado actualmente por Marruecos. Marruecos incluso les denomina sus provincias meridionales, aunque la soberanía marroquí no ha sido reconocida por las Naciones Unidas. Es más, desde 1976, en el sur de dicho territorio, un grupo político llamado Frente Polisario proclamó la independencia e instauró la República Árabe Saharaui Democrática.
La República Árabe Saharaui Democrática controla el resto del territorio en disputa, o los que se identifica como Zona Libre o Territorios Liberados, llegó a tener el reconocimiento de ochenta y dos países, aunque luego algunos han puesto en suspenso o cancelado su relación con ella.
Estamos ante un problema internacional no resuelto, como el emitido por el Asesor Jurídico de las Naciones Unidas al Consejo de Seguridad de la ONU, ya que los Acuerdos de Madrid no hicieron a Marruecos o a Mauritania los responsables de ese territorio. Por ende, para efectos jurídicos (documento S/2002/161), nos encontramos ante un territorio no autónomo que debiera ser administrado por España, pero que en la práctica parte de dicho territorio está tomado por Marruecos y la otra parte o por la autoproclamada República Árabe Saharaui Democrática
La República Árabe Saharaui Democrática ha sido reconocida por la Unión Africana y muchos estados africanos y latinoamericanos, pero no por la ONU, ni por la Liga Árabe, o algún país europeo, ni de alguno de los integrantes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
El gobierno español de aquel entonces dejó abierta la puerta a un conflicto internacional que está lejos de ser resuelto. Marruecos quiere considerar como suyo a todo el Sahara la Opinión Consultiva de la Corte Internacional de Justicia de 1975, y considerando al Frente Polisario más que como un partido, como un instrumento de Argelia en su contra. El Frente Polisario reclama su autodeterminación como pueblo. La Unión Africana, como ya se ha anotado, ha reconocido como República independiente a la República Árabe Saharaui Democrática, y miembro de su institución desde 1982. Es más, desde 2015 ha tomado posturas para la defensa del territorio y recursos de esta república.
Como podemos apreciar, estamos ante un escenario donde hay mucho más que cuarenta carpas dentro de Argelia, sino frente a una situación generada por un desmontaje poco claro de algunas colonias europeas en África, donde incluso las posiciones de potencias como España (directamente involucrada en el problema ) y los mismos Estados Unidos ha sido oscilante, y los mismos Estados Unidos ha sido oscilante, y donde incluso se han dado enfrentamientos a nivel bélico entre el Frente Polisario y Marruecos.
Entonces, nos encontramos ante una materia que debe analizarse con cuidado, estudio y prudencia. No estamos pues, como desafortunadamente se ha dicho, ante un problema de cuarenta carpas en medio de Argelia.