Una de las herramientas más importantes para que Perú cumpla los compromisos que sustentó en el Acuerdo de París de la ONU del 2015 sobre el Cambio Climático es que reduzca sus emisiones de gases efecto invernadero (GEI) que provienen de los combustibles fósiles (hidrocarburos: petróleo y gas natural).
Esta es la llamada transición energética a la cual se han comprometido todos los países firmantes del Acuerdo de París para que la temperatura mundial no aumente en 2°C al 2050. En el 2015, Perú aumentó la meta de reducción al 2030 de los GEI: de 30 a 40%. En diciembre, el ex Presidente Sagasti aumentó la “ambición climática”: seremos un país carbono-neutral en el 2050. La emisión neta de GEI (lo que emitimos menos lo que mitigamos) será 0%.
Para ello es necesario, entre otras medidas, aumentar la generación de energía eléctrica con energías renovables no convencionales, en el Perú llamadas Recursos Energéticos Renovables (RER): solar, eólica, geotermia, biomasa, entre otras. Son energías limpias y no contaminantes.
El Cambio Climático, entonces, modifica sustancialmente la política energética mundial. Se consideraba que eran los ministerios de Energía los que decidían las políticas: la generación de energía eléctrica y la producción y el consumo de hidrocarburos (su sustitución por la electromovilidad incluye a los ministerios de transportes).
Las cosas han cambiado. La política energética es parte de una política de Estado y para su formulación es necesaria la participación del Ministerio de Agricultura, Transportes y otros. Esto se vuelve más relevante aún desde que el Presidente Pedro Castillo anunció en la Asamblea General de las Naciones Unidas en setiembre, que el Perú se declarará en Emergencia Climática.
Por una nueva matriz de generación de electricidad
La generación actual de electricidad depende en un 60% de las hidroeléctricas y en un 35% de las centrales térmicas (a gas natural); el 5% restante proviene de las RER. Hace 10 años la generación con RER era cero (0) ya que todavía no se dejaban sentir los efectos positivos del DL 1002 del 2008, que les otorgó un fuerte impulso: se establecieron subastas, subsidios (ingresos garantizados) y prioridad en la venta (despacho) de la energía producida, así como el acceso a las redes de transmisión y distribución (Ver “Transición Energética y Energías Renovables en un contexto incierto”, 15/03/2021, Humberto Campodónico, http://www.otramirada.pe/transici%C3%B3n-energ%C3%A9tica-y-energ%C3%ADas-renovables-en-un-contexto-incierto).
No solo eso. El DL 1002 planteó una meta específica a cumplirse: en los primeros cinco (5) años las RER debían generar, por lo menos, el 5% de la electricidad que se consume en el Perú. Terminado este período, el Ministerio de Energía y Minas (MEM) “establecerá un porcentaje objetivo de la participación -en el consumo nacional de electricidad- de la electricidad generada a partir de las RER” (Art. 2.2).
Este es el tema central del artículo. La meta de generación del 5% se cumplió en los primeros 5 años. Pero de allí en adelante no se ha fijado ninguna nueva meta. Cierto, ha habido declaraciones de ministros y altos funcionarios del gobierno que, en reiteradas oportunidades, han manifestado que la nueva meta es subir del 5% al 15% la participación de las RER al año 2030.
Pero no existe base legal alguna para esta nueva meta. Existió, sí, el Proyecto de Ley # 6953 (marzo del 2021), presentado por el Congresista Alberto de Belaúnde. Este PL establecía la meta del 15% de generación de electricidad con RER de manera explícita, así como otras medidas administrativas e institucionales para renovar el impulso a las RER. Pero este proyecto fue rechazado por la Comisión de Energía y Minas del Congreso y enviado al archivo en mayo pasado.
Los motivos de este rechazo son varios: se podría afectar el marco jurídico del gas natural; no se podía seguir otorgando subsidios a los proyectos de RER; las tarifas eléctricas podrían subir si se aprobaba el proyecto de ley, entre otros. Desde nuestro punto de vista se podrían resumir en uno solo: las generadoras eléctricas a gas natural hicieron “lobby” para detener el proyecto pues iba en contra de sus intereses particulares.
Dicho de otro modo: la entrada de nuevos proyectos RER compite con las centrales de gas natural actualmente existentes y tendría efectos cualitativos en la actual estructura de la oferta del mercado energético, pues las desplazaría. Dice Brendan Oviedo, Presidente de la Sociedad Peruana de Energías Renovables (SPR):
“El archivamiento del PL 6953 fue ocasionado por la campaña de desinformación desarrollada por varios actores del mercado eléctrico, opuestos al ingreso de energías más competitivas, como la solar y eólica. Desafortunadamente, hay mucha oposición a que las RER tomen un rol predominante o, al menos, importante, en el sector eléctrico peruano. El tema de fondo es que las RER son tan competitivas hoy en día que su despliegue en el mercado local, en igualdad de condiciones, quitará mercado a otras tecnologías de generación eléctrica” (Ver “Hay mucha oposición a que las energías renovables tomen un rol predominante en el sector eléctrico”, El Comercio, 06/05/2021).
¿Seguirán recibiendo subsidios?
Uno de los argumentos para oponerse al aumento de las RER consiste en afirmar que “los subsidios monetarios a las RER encarecen las tarifas eléctricas y, por tanto, a los consumidores, sobre todo a los de bajos ingresos”. Es cierto que, en lasa cuatro subastas efectuadas del 2009 al 2015 los diferentes proyectos solares y eólicos que ganaban las subastas tenían ingresos garantizados.
En efecto, debido a la llamada “Prima RER”, los pagos de los consumidores ascienden, según Osinergmin, a US$ 1,019 millones desde el 2013 al 2020. Veamos. Si, en la subasta, el generador RER ofrece, digamos, un precio de US$ 50/MW hora, ese precio se mantiene a lo largo del contrato. La cuestión es que si el precio en el mercado spot es, digamos, US$ 30/MW hora, entonces los generadores RER recibirán US$ 20 adicionales para llegar a los US$ 50 del contrato original.
Pero eso ha cambiado desde el 2008 hasta la fecha. Los costos de producción de las RER han bajado fuertemente. Dice Daniel Schmerler, Presidente de Osinergmin (La experiencia peruana en energías renovables, mayo 2019) que los precios promedio de la energía solar han bajado 48% del 2009 al 2015 y la energía eólica en 53% en el mismo periodo. Lo mismo sucede con la biomasa (-30%) y las hidroeléctricas pequeñas (-27%).
Fuente; Daniel Schmerler, Osinergmin, 2019.
Y han seguido bajando desde esa fecha en todo el mundo. Dice el Premio Nobel Paul Krugman: “Lo que estamos viendo parece ser una situación en la que el uso creciente de RER está impulsando reducciones de costos. Para la energía solar y eólica hemos visto una serie de mejoras incrementales a medida que las compañías de energía ganan experiencia y se abre paso la producción en masa, lo que causa grandes reducciones en el precio de los componentes, como las palas de las turbinas. Las energías renovables, como señala Roser, parecen estar sujetas a curvas de aprendizaje, en las que los costos caen con la producción acumulada” (“¿Quién creó el milagro de las energías renovables?”, New York Times, 17/08/21).
Agrega Krugman que ello se debe en gran medida al impulso del Estado en las etapas iniciales de la industria: “Cuando una industria tiene una curva de aprendizaje pronunciada, el apoyo del gobierno puede tener enormes efectos positivos. Subsidie usted a una industria de este tipo durante algunos años y sus costos disminuirán con la experiencia y, eventualmente, alcanzará un punto de inflexión en el que su crecimiento se volverá autosostenible y los subsidios ya no serán necesarios” (op. cit).
Cambios normativos
Como se aprecia, entonces, los subsidios ya no serán necesarios en adelante. Por ello, la Prima RER solo se mantendrá para las centrales licitadas en las cuatro primeras subastas. Pero también se necesitan cambios normativos de carácter técnico, de los cuales solo mencionamos dos. Primero, las contrataciones se harían por bloques horarios para que cada generador oferte conforme a su curva de producción. Dicho de otro modo, las centrales solares podrían vender de día, que es cuando alcanza su capacidad máxima de producción. Otro cambio podría ser el hecho que se permita la compra de energía y potencia de forma separada, lo que mejora la competitividad de las RER.
Estas mejoras en la oferta de las RER deberán ser analizadas en detalle y con opiniones autorizadas, lo que justamente, estaba establecido en el archivado PL 6953 del congresista Alberto de Belaúnde.
La necesaria transición energética y el rol del Estado
En diciembre pasado el ex Presidente Francisco Sagasti anunció que Perú aumentaba su “ambición climática”, como dijimos al inicio. Y también que el Presidente Pedro Castillo nos declarará en Emergencia Climática, lo que deberá llenarse de contenido. De su lado, el coordinador nacional del Movimiento Ciudadano frente al Cambio Climático, dijo: “Esperamos que con esta declaración se abra un diálogo para el desarrollo de la agenda climática en el país con la implementación de las medidas de adaptación y mitigación, y que se asignen los presupuestos necesarios”.
Esa es la clave: diálogo y presupuestos. Es imprescindible que estos acuerdos se plasmen en un Plan de Mediano Plazo, con la participación de todos los actores (gobierno, empresarios, universidades, colegios profesionales y sociedad civil) que tenga un carácter vinculante, es decir, obligatorio para todas las partes.
Esto es lo que falta y no está sucediendo, por ejemplo, en la meta, declarada pero sin base legal alguna, de que la generación de electricidad sea producida, en un 15%, por energías renovables no convencionales (sobre todo solar y eólica, pero también biomasa y geotérmica).
Lo peor es que hace pocos meses, como hemos visto, el Congreso mandó al archivo el Proyecto de Ley # 6953 que, justamente “proponía cambiar la estructura regulatoria para permitir a la tecnología eólica y solar competir en las mismas condiciones que las tecnologías que operan actualmente en el mercado y sin crear ningún tipo de subsidio” (Brendan Oviedo, Presidente de la Sociedad Peruana de Energías Renovables, Los desafíos del próximo gobierno, en Crisis Climática, Especial de La República, Día Mundial del Ambiente, 05 de junio 2021).
Y agrega: “el aspecto más importante de este proyecto de ley era la convocatoria
a un proceso de planificación energética, estratégica, inclusiva y transversal
que estableciese objetivos de corto, mediano y largo plazo, y los mecanismos para
lograr dichos objetivos. Nunca ha habido una planificación energética en el Perú, y sigue sin haberla”.
Lo más probable es que intereses económicos empresariales del sector energía no desean la competencia que -sin subsidios- proponen las energías renovables. Esta transición energética está bajo ataque.
Y que esto también esté sucediendo en otros sectores. Los intereses de los “dueños de la molécula, que están establecidos en la Constitución de 1993 no deben primar, pues primero están los compromisos del Perú con la comunidad mundial y con su población. Estamos en Emergencia Climática, ha dicho el Presidente Castillo. Hay que actuar en consecuencia.
Esperemos que en el gobierno de Peter Castell, haya voluntad política para empezar la transición…y sea respaldado con un presupuesto….y Framke respalde el cambio de matriz.