Han pasado 10 días desde que 6 mil barriles de petróleo se derramaron en la playa Cavero de Ventanilla por parte de la Refinería La Pampilla, empresa administrada por Repsol.
La empresa española a través de su presidente Jaime Fernández- Cuesta, confirmó que tienen como objetivo limpiar las más de 15 playas afectadas antes de que finalice febrero.
Ayuda. Con el propósito de que no se vea más afectado tanto las playas como la fauna marítima, las Fuerzas Armadas han puesto a disposición aproximadamente 600 efectivos para apoyar los trabajos de limpieza. Cada uno de los trabajadores tenía la protección necesaria.
“No solamente hacen el trabajo menudo, sino también asesoran a grupos de voluntarios y de algunas municipalidades que están poniendo el hombro en este tema”, dijo el viceministro de Recursos para la Defensa, Rigoberto Coico Monroy.
Coico enfatizó y resaltó el trabajo de los infantes de la Marina de Guerra y de la nueva unidad especializada del Ejército, la Compañía Nuclear, Biológica, Química y Radiológica 21 de la Primera Brigada Multipropósito.
Asimismo, el viceministro hizo hincapié en la rápida respuesta de la Dirección General de Capitanía y Guardacostas (Dicapi) de la Marina de Guerra, que lleva adelante una investigación sobre las causas del derrame de petróleo y sus consecuencias.
“Se lleva a cabo una investigación con el debido proceso para determinar las responsabilidades de los participantes y una vez que terminen los peritajes, que ya están avanzados, poder determinar cuál fue la causa, dónde estuvo la responsabilidad y, sobre todo, identificar plenamente a los responsables”, aseveró.
Finalmente, dejó en claro que la contaminación no solo ha afectado a la biodiversidad, sino que también está causando gran perjuicio en la población que vivía del mar y que todo ello debe cuantificarse.
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