Por Diana Miloslavich Tupac, con la colaboración de Katherine Soto
La desaparición de Gabriela Sevilla conmocionó al país. Y así, la atención nacional tomó en cuenta lo que viene sucediendo con las desapariciones de mujeres, niñas y adolescentes. Las desapariciones de mujeres están vinculadas a otras formas de violencia de género: violencia sexual, trata, feminicidio.
La desaparición y feminicidio de Solsiret Rodriguez nos mostró todas las debilidades del sistema en que vivimos. Ya un ex ministro del interior pidió disculpas por no haber prestado debida atención a las denuncias en su momento. Y es todo el sistema de justicia que responde lento, tarde, con estereotipos. Solsiret desapareció el 23 de agosto del 2016, y lo que escucharon sus padres fue “Seguro que se fue con otro”. Tres años demoró el resultado de la operadora que, con la geolocalización y con el levantamiento del secreto de la comunicación, supimos que nunca abandonó la vivienda donde fue cruelmente asesinada.
Hay algunos avances realizados por el Estado, pero son insuficientes. El sistema de justicia requiere de cambios fundamentales para que sea una prioridad las desapariciones. Esperamos que sea esta una oportunidad para hacerlo. Y que haya un acuerdo para impulsar los cambios, reformas, recursos que se necesitan.
¿Qué avanzamos?
Ahora, desde el Observatorio Nacional de Seguridad Ciudadana, sabemos en tiempo real que hay 14,151 personas desaparecidas, de las cuales 8,698 son mujeres y 7,298 menores. También decir que hay 163 venezolanas en ese grupo de mujeres, siendo el grupo de mujeres migrantes con un mayor número de denuncias por desapariciones, seguido de Ecuador y Colombia, respectivamente. Asimismo, durante el 2021, San Juan de Lurigancho fue el distrito que presentó mayor número de denuncias por desapariciones en todo el país, contando con 798 casos, de los cuales 497 son mujeres.
El 05 de abril de 2022, se aprobó el Decreto Supremo 005-2022-MIMP, que modifica el Reglamento de la Ley 30364, Ley para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres y los integrantes del grupo familiar. La propuesta incluyó dentro de las modalidades de violencia la desaparición de personas realizada por particulares. Esta última acorde a las recomendaciones de Comité Expertas MESECVI.
Se creó la Comisión Multisectorial para el Fortalecimiento del Sistema de Búsqueda de Personas Desaparecidas, aprobada mediante Decreto Supremo 002-2022-IN, el 06 de junio de 2022. Ya salió su Reglamento, pero necesitamos que funcione y tenga resultados que la ciudadanía y familiares esperan.
¿Qué necesitamos?
Que haya una comprensión de cómo y por qué se dan las desapariciones. Para ello no solo necesitamos de estadísticas, sino escuchar a los familiares y conocer como se dan estas desapariciones. En los casos de feminicidio, muchas de estas mujeres hicieron denuncias de violencia de género formalizadas y en otras de conocimiento de sus entornos familiares, sociales, culturales. Un país donde el machismo se expresa a diario a nuestro alrededor y que naturaliza la violencia contra las mujeres, niñas, adolescentes y que evidencia las desigualdades y las discriminaciones en las que vivimos las mujeres y la tolerancia a las diversas formas de violencia que día a día vivimos explica esta pandemia.
Que las empresas de telefonía del país (CLARO, MOVISTAR, BITEL y ENTEL), implementen una ventanilla única para la atención de los pedidos judiciales de levantamiento de secreto de comunicaciones y entre otras acciones correspondientes a casos de desapariciones de niñas, niños, adolescentes y mujeres. Ello con la finalidad de priorizar en la respuesta oportuna ante estos casos
Necesitamos un Banco Genético de Datos, que permita tener información voluntaria de familiares de personas desaparecidas, la que podría contribuir con evitar revictimizar a las familias al momento de ubicar el cuerpo y contar con un instrumento para continuar con la búsqueda cuando la familia ya no se encuentra.
Modificar el Decreto Legislativo 1428, para que incluya otros componentes de interculturalidad y enfoque de género en el marco del Sistema de Búsqueda de Personas Desaparecidas.
Modificar las normativas vinculantes a las responsabilidades de las empresas de telefonía en materia de respuesta y solicitud de información frente a una desaparición. Aquí es importante revisar el DL 1182.
Tener de aliados a los medios de comunicación. Como lo recomienda la Defensoría del Pueblo necesitamos que “Los medios de comunicación nacionales y locales deban adoptar un rol activo en la difusión de notas de alerta y alertas de emergencia emitidas ante la desaparición de niños, niñas, adolescentes y mujeres afectadas por violencia de género”.
Sincerar la información, por ello la publicación de las desapariciones y quienes han sido encontradas es importante y desagregar las estadísticas por sexo y edad. Fortalecer el Registro Nacional de Información de Personas Desaparecidas (RENIPED) y garantizar el acceso a la información oportuna con recursos.
Y sobre todo acompañar a los familiares y sus organizaciones en su dolor, en sus luchas por encontrarlas. Al momento de cerrar esta redacción, una adolescente de 14 años, reportada como desaparecida hace cuatro días, fue hallada sin vida en Iquitos.